Muchas veces la vida comienza con un error…
Y tal vez ese error significo tu salvación…
Ella una vez fue tu luz… y también fue tu perdición…
El fantasma de mi agonía…
La sombra de mis pesadillas…
Todo comenzó con una traición…
(Eres Bienvenido a mi infierno sin siquiera invitación…)
Un recuerdo de ti,
De lo que fue una vez nuestro paraíso.
Un recuerdo de lo que fui,
Una victima indefensa.
Presa de tus temores, dudas, decepciones y traiciones.
Aun así demostraste fortaleza. Pero Tus alas rasgaron,
Esa tarde ante mis inocentes y ciegos ojos…
Recuerdo comprender tu tristeza al abrazarte.
Al decirte “No llores”. Ambos lloramos por ella…
Única testigo de tus crímenes por tantos años.
Ya no mas…
Te di refugio sin siquiera conocer el porque
…sin razón alguna solo por el hecho de secar tus lagrimas,
Solo por el hecho de amarte sin pedir nada más que comprensión y amor a cambio.
Padre…fue mucho pedir??...
Una segunda traición me invadió una tarde
Mi imagen comenzó a desfigurarse…
Mi corazón a romperse. Mi mundo a temblar.
Mis años se incrementaron dentro mío…algo comenzó a morir.
Sola, en agonía por mi misma. Hundiéndome en mis propios vicios.
Ahogándome en mi propia sangre. Pidiendo ayuda sin poder hablar.
Y esa maldición gitana que cayó sobre nosotros…
Desmoronando la fortaleza de mi héroe.
La tierra se abrió debajo de nuestros pies.
Solo escaparon demonios.
Si…han estado pendientes de mi alma, sin suerte alguna.
Maldita la hora donde fui bendecida con el don para poder verlos…
La noche que te fuiste jugaron a ser tú…
Jugaron a imitarte… tus pasos, tu respiración sobre mi hombro…
Tu sombra, Tu presencia… aun era una niña…
Hasta el día de hoy siento que se esconden de mí.
…cobardes…
Juegan a imitarme…
Juego a ignorarlos…
Conspiramos mutuamente.
Mis futuros anhelos ya no son tan claros,
Mis caminos contienen muchas grietas que producen mis estupidas caídas y tropiezos.
Esas piedras que debo sacar… obstáculos que me retan a mejorar.
Me he resignado a caer buscando en el medio alguien que amortigüe mi caída final.
Que solo me mantenga despierta, que solo me proteja…
Que al dormir vele por mi alma,
Vele por mis sueños…
Ya no puedo con demasiado.
Aquel ángel me ha elegido para enseñarme a sobrevivir
Porque tú te has dejado vencer.
Deseo tanto la muerte… es parte de mi
Pero no puedo evitar el querer vivir…
Parte mía anhela una tercera traición.
No me escuches, es Mi sed de venganza.
Pero seria nuestro final.
Mi derrota ante mi misma y ante ti…